La Unidad de Atención Integral a pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal Pediátrica del Hospital Regional Universitario de Málaga, que atiende anualmente a unas 140 personas, ha recibido la certificación de calidad que concede el Grupo Español de Trabajo en Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa (GETECCU). Este reconocimiento, considerado el más importante en España, es un proyecto desarrollado e impulsado por GETECCU, auditado por Bureau Veritas, con el apoyo de la biofarmacéutica AbbVie, y sitúa al centro sanitario como hospital de referencia a nivel regional y nacional.
El responsable de la Unidad de Atención Integral a pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal Pediátrica Hospital Regional de Málaga, Víctor Manuel Navas López, ha indicado que “esta acreditación supone un reconocimiento al esfuerzo y trabajo en equipo de todas aquellas personas que día a día trabajan por y para la enfermedad inflamatoria intestinal pediátrica”.
Navas, ha añadido que “este reconocimiento supone una gran responsabilidad y da continuidad a una etapa reconocida de excelencia en el manejo y cuidado de pacientes pediátricos con enfermedad inflamatoria intestinal”.
Según Navas, el objetivo de esta unidad, que atiende anualmente a unas 140 personas, es ofrecer una abordaje holístico y multidisciplinar a los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal y a sus familias, manteniendo al paciente y a sus familias en el centro de atención, destacando el papel de la Unidad de Atención Integral de Pacientes en el proceso de transición desde el ambiente pediátrico al de adultos.
Sobre la EII
La EII se define como un grupo de trastornos inflamatorios que engloba dos entidades fundamentales: la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Se trata de una patología de causa desconocida pero mediada inmunológicamente, y cuyos síntomas son muy variados y suelen incluir la diarrea o el dolor abdominal, llegando en ocasiones a requerir cirugía o ser incapacitantes para los pacientes.
El debut de la enfermedad suele ser en edades jóvenes y durante su desarrollo se pueden presentar complicaciones, tanto intestinales (oclusión intestinal, deficiencias nutricionales y sus consecuencias, etc.), como extraintestinales (dermatológicas, reumatológicas, oculares y hepatobiliares, entre otras). La aparición de los síntomas de la enfermedad es impredecible, con periodos de ausencia de síntomas y brotes y, en muchos casos, llegan a requerir hospitalizaciones e intervenciones quirúrgicas. La cronicidad, variabilidad e imprevisibilidad de la enfermedad, los controles periódicos, un tratamiento farmacológico continuado y la posible necesidad de exploraciones endoscópicas o intervenciones quirúrgicas, tienen una gran repercusión en la vida familiar, laboral y social del paciente, y condicionan considerablemente su percepción de salud y su calidad de vida.
A pesar de los avances, aún existen importantes necesidades no cubiertas para las personas que viven con enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa. Estas necesidades se centran en disponer de nuevas opciones terapéuticas más eficaces que permitan prolongar la respuesta de los pacientes a los tratamientos y ofrecer soluciones a todo el amplio espectro de pacientes, mejores herramientas de detección y un diagnóstico más temprano. Además, los pacientes también buscan seguir optimizando el manejo de la EII con el objetivo de beneficiar su calidad de vida y que la patología no afecte ni limite su día a día, una mayor comprensión y conciencia pública y seguir centrándose en conocer más sobre la EII, todavía desconocida en ciertos aspectos relacionados con sus causas, evolución, abordaje, etc.
