El Gobierno ampliará la baja por nacimiento a 20 semanas y retribuirá, al menos, cuatro semanas de las ocho de permiso parental por cuidados. Estas ocho semanas podrán disfrutarse de manera interrumpida o discontinua hasta que los hijos cumplan los ocho años.
Así lo ha anunciado el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, quien ha asegurado que la ley de Familias -prometida a acabarla en junio de 2023- verá la luz en 2024. Además, ha afirmado que su prioridad para el próximo año es aprobar «con celeridad» la ley de Familias «para saldar una deuda histórica», en referencia a la infrafinanciación: «El cuidado de la vida es un bien público esencial», ha recalcado.
Un dictamen del Consejo de Estado sobre el anteproyecto criticaba que este permiso por cuidados no fuera retribuido, como exige la directiva europea en la que se basa. Por ello, el Gobierno se abrió a modificarlo, al menos en parte, durante la tramitación parlamentaria que finalmente no llegó debido a la convocatoria de elecciones generales.
Otras de las medidas que se estudiaron en el anteproyecto de la ley y se aprobaron fue el permiso retribuido de cinco días por «accidente o enfermedad grave» del cónyuge o pareja de hecho -además de parientes de hasta segundo grado y convivientes- y otro de cuatro días «por motivos familiares urgentes e imprevisibles», que también sería pagado.