25 años lleva la Virgen del Carmen en la capilla de la Bajadilla, en el Puerto Pesquero de Marbella. Ahora, por primera vez, la Hermandad de la Virgen del Carmen Coronada ha decidido retirarla de su lugar de culto tras sufrir hasta cuatro intentos en tan solo un año. «Es triste y frustrante», lamenta Raul Domínguez, tercer teniente Hermano Mayor de la Hermandad, en una entrevista con AZ.
El último robo se produjo el pasado Jueves Santo, cuando robaron un rosario, un escapulario y joyas de oro que tenía la Virgen: «Calculamos pérdidas de entorno a los 1.200€», confirma Domínguez. Pese a los numerosos intentos por parte de la Hermandad de proteger la capilla -reforzando las vitrinas e instalando candados-, los robos no han cesado y se ha decidido retirar, temporalmente, la Virgen de su lugar de culto.
«Hay veces que se han llevado hasta las flores, no sabemos quienes son, pero se llevan todo lo que pueda tener algo de valor», indica. La frustración en la Hermandad es tan alta, que «hasta que no se encuentre otra solución» aseguran que la Virgen no volverá a la capilla.
«Son muchos los devotos que pasan por aquí todos los días», explica Domínguez, lamentando la ausencia de la imagen en su emplazamiento habitual. Muchos preguntan que «cuándo la vamos a traer y si no la vamos a traer más, es algo que impacta».
No es una imagen cualquiera. Con un fuerte valor sentimental, Nuestra Señora del Carmen representa en Marbella un arraigo personal para los que viven del mar. «Cada año se celebra la misa en el Puerto, donde la Cofradía de Pescadores entrega el ancla al marinero más antiguo», recuerda Domínguez.
A pesar de la situación, desde la Hermandad confían en poder devolverla a su lugar lo antes posible: «Esperemos que pronto podamos traerla».