Casares se sumó ayer a la concentración en el Parlamento regional para pedir una regulación adecuada de las renovables. Una protesta en la que participó el alcalde Pepe Carrasco, junto a casi un centenar de ayuntamientos de diferente signo político. Y que se realizaba coincidiendo con la presentación en el Parlamento Andaluz de una Iniciativa Legislativa Municipal para pedir una regulación adecuada para la instalación de megaparques fotovoltaicos y eólicos.
Bajo el lema “Renovables Sí, pero no así”, los ayuntamientos andaluces habían solicitado mediante una Proposición de Ley la planificación, la ordenación y la participación ciudadana en la toma de decisiones sobre la instalación de megaproyectos industriales eólicos y fotovoltaicos en suelo andaluz. Una Iniciativa Legislativa Municipal, que a pesar de contar con la mayoría de los grupos políticos fue rechazada por el Parlamento Andaluz, al imponer el PP su mayoría absoluta.
Casares, al igual que otros municipios afectados por la masiva implantación de plantas fotovoltaicas y de energías renovables, pide una moratoria para los megaproyectos de energías renovables hasta la aprobación del Plan de Transición Energética en Andalucía, al considerar que se está promoviendo la especulación y el beneficio económico de grandes corporaciones, sin tener en cuenta el territorio ni el medioambiente. Actualmente en Andalucía se están tramitando más de 1.000 proyectos de energías renovables que de ser aprobados, afectarán de forma irreversible a los ecosistemas y a la vertebración del medio rural, y destruyendo sectores económicos como la agricultura, la ganadería o el turismo.
