Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a un hombre por su presunta responsabilidad en un delito de descubrimiento y revelación de secreto a una compañera de trabajo, ya que supuestamente el investigado habría instalado un software de control remoto en el teléfono de la víctima y a través de él obtuvo imágenes y conversaciones de la mujer.
Según han informado desde la Comisaría provincial, la investigación se inició en el mes de enero de este año, a raíz de la denuncia presentada por una mujer al comprobar que en su móvil existían una serie de imágenes y archivos de su vida personal sin que fuera consciente de haber sido grabada o fotografiada.
A partir de ese momento los agentes realizaron las pesquisas pertinentes para esclarecer las circunstancias y detener en su caso a la persona responsable, han señalado a través de un comunicado.
Según las pesquisas, el investigado habría instalado el programa en un dispositivo Android que la víctima tenía tiempo atrás y al cambiar de teléfono a primeros de año fue cuando pudo comprobar que tenía instalado un programa con archivos que contenían imágenes de ella, conversaciones, tanto telefónicas como conversaciones cotidianas, captadas a través del micrófono del teléfono.
Los agentes de la Sección de Ciberdelincuencia localizaron más de 1.000 archivos contenidos en una carpeta. Dichos archivos se correspondían con vídeos e imágenes de la denunciante, realizando actividades propias de su intimidad y su vida diaria, muchas de ellas en el interior de su propio domicilio.
La aplicación utilizada permite usar los teléfonos móviles, tabletas electrónicas y computadoras, convirtiéndolos en un sistema de vigilancia casero, con el que se puede monitorizar hogar, local o almacén, etcétera, de forma remota, ha explicado la Policía Nacional.
La aplicación instalada estaba asociada a una de las cuentas de correo electrónico de la propia víctima, la cual estaba instalada en el propio teléfono.
Una vez comprobados los archivos, los agentes localizaron en algunos de ellos a una persona ajena a la víctima que manipulaba su terminal telefónico. Esta persona resultó ser un compañero de trabajo de la víctima con la que no tenía otra relación que la profesional.
Finalmente y coordinados con la autoridad judicial se recibieron los correspondientes mandamientos judiciales que concluyeron con la detención del presunto autor de los hechos, un compañero de trabajo de la denunciante, por su presunta responsabilidad en un delito de descubrimiento y revelación de secretos. En el registro practicado, los agentes intervinieron diversos dispositivos electrónicos que serán sometidos a un análisis forense pertinente.
Desde la Policía Nacional han incidido en que la aplicación utilizada, disponible en las plataformas de descarga de aplicaciones, tiene como finalidad localizar dispositivos perdidos –gracias a la localización por GPS–, utilizar teléfonos antiguos como cámara IP de vigilancia para proteger el hogar, incluso como pequeña alarma, al ser capaz de detectar movimientos.
Pero han señalado que en este caso «habría sido usada de forma delictiva, de tal forma que ha espiado a la víctima, vulnerando su intimidad».
