La primera jornada de huelga convocada por el sindicato USO para los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) de easyJet ha dejado un balance de 31 vuelos cancelados en las bases españolas, afectando a 62 trayectos si se cuentan los vuelos de ida y vuelta. En el Aeropuerto de Málaga, siete vuelos se han visto directamente cancelados, mientras que en Barcelona han sido nueve y en Alicante tres. El aeropuerto de Palma es el que ha registrado el mayor número de cancelaciones, con un total de 12. Además de la huelga, la compañía ha reportado algunas incidencias debido a la «falta de personal por temas médicos», lo que ha causado aún más alteraciones en los vuelos.
La protesta, que se desarrolla durante los días 25, 26 y 27 de junio, busca que los TCP españoles de easyJet consigan la igualdad salarial con el resto de sus compañeros europeos. Según el sindicato USO, los tripulantes de cabina en España reciben los salarios más bajos, con un sueldo base de 14.067 euros anuales, mientras que sus colegas en otros países, como Portugal o Suiza, perciben desde un 29% hasta más de un 200% más. Pier Luigi Copello, secretario general de USO en easyJet, lamentó las molestias ocasionadas a los pasajeros y subrayó que los afectados son también «víctimas de una empresa que no respeta a sus trabajadores».
Ante esta situación, el Ministerio de Transportes ha fijado unos servicios mínimos para garantizar la continuidad de la operación aérea, con un rango de entre el 81% y el 90% de los vuelos cubiertos.
En Málaga, los servicios mínimos son del 90%, mientras que en Palma se han establecido en el 81%, en Alicante el 88% y en Barcelona el 86%. El sindicato no descarta intensificar las protestas e incluso convocar una huelga indefinida a partir de agosto si no se observa una «real voluntad negociadora» por parte de easyJet.
