Marbella se preparara para celebrar una de sus fiestas más tradicionales: Santa Marta. El barrio en honor a la patrona de la hostelería los días 26 y 27 de julio en el parque Arroyo de la Represa, con actividades dirigidas a todos los públicos.
Así lo ha presentado el concejal de Participación Ciudadana, Enrique Rodríguez, y representantes de los colectivos vecinales de la zona. El edil ha mostrado el respaldo a las asociaciones organizadoras, que “fomentan la devoción a Santa Marta en nuestra ciudad”. “Gracias a su implicación, esta festividad con más de cuatro décadas de tradición sigue viva en el barrio”, ha señalado.
La programación, que organiza también la delegación de Fiestas, arrancará el sábado 26 de julio a las 19.00 horas con una fiesta infantil del agua, totalmente gratuita, en el templete del Parque de la Represa. Posteriormente, a las 21.00 horas, comenzará la velada con la elección de Reina y Damas y Rey, cuyas urnas estarán disponibles desde las 19.00 horas en la zona del escenario. Habrá dos categorías, infantil y juvenil, y la elección se realizará mediante sorteo. La jornada continuará con actuaciones de los grupos de baile de Eli García, Sandra Vázquez y las hermanas Cervera, y culminará con música en directo hasta la 01.00 horas, además de una barra con precios populares y atracciones infantiles para los más pequeños.
El domingo 27 de julio tendrá lugar el acto más solemne con la procesión de Santa Marta, que partirá a las 19.00 horas desde su capilla en la calle Pedro Artola y recorrerá las calles del barrio de Santa Marta y Divina Pastora hasta llegar a la Parroquia de la Divina Pastora, donde se celebrará una eucaristía a las 20.00 horas.
La ceremonia incluirá una ofrenda floral y la imposición de medallas a los nuevos hermanos y hermanas de la cofradía y, posteriormente, la imagen regresará a su capilla.
Desde el Ayuntamiento, y en colaboración con las asociaciones, agradecen el esfuerzo «de quienes hacen posible esta festividad año tras año”. Así, Rodríguez lanza una invitación a toda la ciudadanía «a vivir una celebración que combina devoción, cultura y convivencia».
