El Ayuntamiento, la Asociación Huertos Marbella Verde y Cruz Roja colaboran en una iniciativa solidaria para abastecer de alimentos naturales a familias vulnerables. La alcaldesa, Ángeles Muñoz, ha respaldado hoy la entrega a la ONG de productos recolectados por una decena de voluntarios del colectivo de hortelanos en una parcela municipal de Huerta del Prado.
La regidora ha explicado que este proyecto tiene su origen en la cesión por parte del Consistorio de 28.000 metros cuadrados de terrenos donde cerca de un centenar de personas realizan sus propias cosechas. “Es un orgullo ver no solo cómo cuidan y mantienen ese espacio, sino que la creación de este huerto solidario en un área de 200 metros cuadrados demuestra además una generosidad inmensa”, ha señalado la primera edil, quien ha incidido en la importancia de que los vecinos “tuvieran la posibilidad de producir sus propios alimentos en el centro de la ciudad y de apostar desde el Ayuntamiento por la producción de ‘kilómetro cero”.
Por su parte, la presidenta de Cruz Roja Marbella, Susana Radío, ha agradecido la iniciativa y ha indicado que esta cosecha, cultivada de manera natural por voluntarios según la temporada, se destinará íntegramente a las más de 270 personas en situación de vulnerabilidad que la entidad atiende actualmente. «Esta donación nos permite ofrecer productos frescos y saludables a familias que, debido a la pobreza alimentaria, a menudo solo pueden acceder a comestibles más baratos y menos sanos”, ha apuntado, al tiempo que ha detallado que “hacemos una valoración de los ingresos y la situación de cada unidad familiar para asegurar que la ayuda llega a quienes más lo necesitan».
Radío ha adelantado la intención de ampliar la colaboración con nuevas iniciativas, como la organización de visitas para personas mayores o la puesta en marcha de cursos de formación en jardinería, “un sector con demanda laboral en la zona”. Por último, el presidente de la Asociación de Huertos Urbanos, Dionisio Carrillo, ha aludido a que el método de cultivo de los vegetales entregados a la ONG, en este caso tomates, pepinos, pimientos y calabacines, “es agricultura natural en la que no usamos ningún tipo de insumo químico, solo productos naturales”.