Agentes de la Policía Nacional han salvado la vida en Málaga, gracias a la práctica de maniobras de reanimación cardiopulmonar, a un ciudadano que se había desplomado en la vía pública y no respondía a estímulos. Tres policías, uno en periodo de prácticas, realizaban labores propias de su cargo en la avenida Simón Bolívar cuando observaban cómo una persona caía desplomada al suelo, perdiendo la consciencia y sin signos de respiración. Tras valorar rápidamente la situación crítica, los agentes se coordinaron para iniciar la RCP y avisar a una ambulancia.
Agentes adscritos a la Comisaría de Distrito Norte realizaban cometidos propios de policía judicial en la capital malagueña cuando de repente observaban cómo un varón caía al suelo en la vía pública, momento en el que no dudaron en intervenir. Tras comprobar que no respondía a estímulos -estado de inconsciencia- y que no respiraba, iniciaron las maniobras de reanimación e informaron a la Sala del 091. Paralelamente se solicitaba una ambulancia.
Mientras los agentes realizaban la reanimación cardiopulmonar, el varón, de 66 años, comenzó a dar bocanadas agónicas. Tras unos minutos llegaba al lugar una ambulancia de un centro de salud próximo, así como un indicativo de Policía Local, aportando un desfibrilador portátil, sumando todos esfuerzos en la reanimación del ciudadano, el cual recuperó in situ la respiración y ritmo cardiaco.
Una vez estabilizado el hombre fue trasladado al hospital en un vehículo medicalizado, destacando los sanitarios que, gracias a la rápida intervención de los policías -con la práctica de maniobras RCP-, se había podido reanimar a la víctima, la cual había sufrido una parada cardiorrespiratoria.
Evolución favorable
En última instancia, los agentes de la Policía Nacional trasladaban a la mujer del paciente al centro hospitalario para que se reuniera con su marido –en el momento del desvanecimiento acompañaba a su familiar-. Tras lo sucedido, los agentes se interesaron por la evolución de esta persona y contactaron telefónicamente con la mujer, que indicó que su esposo estaba estable y que aún permanecía ingresado a la espera de pruebas complementarias.
