El Ayuntamiento de Benalmádena está ultimando la instalación de una planta fotovoltaica en el techo del edificio de Varadero, en el Puerto Deportivo. El alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara, ha supervisado los trabajos, acompañado del edil del Puerto, José Luis Bergillos, y ha informado de que la planta contará con un total de 190 paneles, lo que “la convierte en la segunda más grande de todo el municipio”.
“El Puerto Deportivo de Benalmádena da un paso más y ya no solo es un referente en materia deportiva y turística, sino también en sostenibilidad y eficiencia”, ha explicado el regidor durante su visita a las instalaciones, en la que ha detallado que cada uno de los paneles instalados tendrá una potencia de 535 watios, lo que permitirá generar unos 180.000 kilovatios-hora al año, “lo que equivale al 20 por ciento del consumo actual del Puerto”.
“A través de esta planta, el 20 por ciento de la energía que actualmente consume la marina benalmadense estará cubierta, lo que sin duda contribuirá a un considerable ahorro de la factura eléctrica, una vez que se amortice la inversión realizada”, ha continuado el primer edil, quien ha señalado que la inversión total realizada en esta instalación asciende a 86.417 euros y está incluida dentro de las inversiones relevantes exigidas por la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) para la prórroga excepcional de la concesión”.
Dentro de dicho contrato se recoge también la instalación de dos puntos de recarga de vehículos eléctricos, que estarán alimentados por esta planta, que comenzará a funcionar a finales del mes de enero de 2026.
Por su parte, el edil del Puerto ha señalado que a esta actuación se suman otras de relevancia, “también enmarcadas en una estrategia verde, con la que buscamos seguir creciendo y mejorando, pero siempre respetando y cuidando nuestro entorno, que es en definitiva nuestro mayor valor”. En esa línea, según ha explicado Bergillos, se ha culminado ya la instalación de arrecifes artificiales para la regeneración de la flora y fauna marina en los fondos de este entorno y también se están rematando las tareas de desguace de la embarcación Willow, “que llevaba años semihundida en el Puerto, con el peligro de contaminación que suponía”.
