La detección precoz y las nuevas técnicas de tratamiento hacen que el ictus sea una urgencia cada vez más recuperable.
El ictus continúa siendo una de las principales causas de mortalidad y, especialmente, la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto en España. “Combina tres factores clave: su alta frecuencia, la gravedad de sus secuelas cuando no se trata de forma precoz y el envejecimiento progresivo de la población”, explica el doctor Jesús Romero Imbroda, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Quirónsalud Marbella y del Hospital Quirónsalud Málaga.
El especialista recuerda además que se trata de una patología tiempo-dependiente: “Cada minuto sin tratamiento supone la pérdida de millones de neuronas, lo que condiciona el pronóstico vital y funcional”.
Incidencia al alza, mortalidad a la baja: el papel de la prevención
Aunque el número total de casos ha aumentado debido al envejecimiento de la población y a factores como hipertensión, diabetes, obesidad, sedentarismo, estrés crónico y malos hábitos, el pronóstico mejora gracias a una mejor atención urgente. “Vivimos más años y el ictus es una patología muy ligada a la edad. La buena noticia es que la mortalidad ha disminuido gracias a la mejora en la atención urgente”, señala el doctor Romero.
Más del 80 % de los ictus pueden prevenirse con un adecuado control de factores de riesgo. En este sentido, el especialista en Neurología subraya que el estilo de vida también es determinante: la dieta mediterránea, el ejercicio regular y la gestión del estrés reducen significativamente el riesgo vascular. “La salud del cerebro depende en gran medida de cómo cuidamos nuestro sistema cardiovascular”, añade.
La rapidez es decisiva. Las señales de alarma son claras: pérdida brusca de fuerza, dificultad para hablar o entender, alteraciones visuales, inestabilidad, mareo intenso o dolor de cabeza súbito. “Ante cualquiera de estos síntomas, hay que llamar inmediatamente a emergencias. En ictus, el tiempo es cerebro”, insiste el especialista del Hospital Quirónsalud Marbella.
Abordaje actual: código ictus, unidad especializada e intervenciones avanzadas
En los últimos años, la atención al ictus ha experimentado un cambio profundo. “El abordaje del ictus ha cambiado de forma radical. Hoy hablamos de código ictus, unidad de ictus especializada, atención multidisciplinar urgente y tratamientos de reperfusión muy eficaces”, explica. Gracias a estos avances, muchos pacientes que antes no tenían opciones terapéuticas pueden hoy recuperar su autonomía si llegan a tiempo al hospital adecuado.
Entre los hitos más trascendentes destaca la trombectomía mecánica, un procedimiento que permite extraer el trombo mediante un catéter en casos de obstrucción de grandes arterias: “Es uno de los mayores avances de la neurología moderna. Puede realizarse entre 6 y 24 horas en casos seleccionados, y multiplica las posibilidades de recuperación funcional”.
Tecnología de última generación para diagnosticar antes y tratar mejor
El Hospital Quirónsalud Marbella incorpora herramientas punteras que permiten identificar de forma rápida qué parte del cerebro está afectada y cuál puede salvarse con tratamiento inmediato. Entre ellas destacan el Angio TC, la TC de perfusión, la resonancia de alta resolución y la angiografía cerebral. También la telemedicina y los sistemas de inteligencia artificial, capaces de detectar automáticamente obstrucciones en las imágenes. “Todo ello ha permitido diagnosticar antes, decidir mejor y tratar con mayor rapidez”, concluye el doctor Romero.















