El Juzgado de lo Penal número 14 de Málaga ha decretado la extinción de la responsabilidad penal de un empresario iraní acusado de maltrato habitual y lesiones contra al menos cinco mujeres con las que supuestamente convivía y mantenía relaciones de pareja en Marbella. La decisión, adoptada por auto de prescripción y archivo dictado en noviembre de 2024, pone fin a un proceso iniciado hace más de una década y que nunca llegó a juicio por la reiterada ausencia del acusado.
La causa comenzó en 2014 a raíz de la denuncia de nueve mujeres que acusaban al empresario de maltrato, amenazas y conductas coercitivas. Se programaron varias fechas para la vista oral, pero ninguna pudo celebrarse al no lograrse la localización del procesado. En 2019, el juzgado ordenó su busca y captura para asegurar su comparecencia, y en 2020 se le declaró oficialmente en rebeldía, lo que paralizó los plazos procesales. Tras años sin avances y con la imposibilidad de enjuiciarle, el tribunal optó por archivar el caso.
La Fiscalía de Málaga solicitaba inicialmente 12 años y cuatro meses de prisión por unos hechos que calificaba de extrema gravedad. Según el escrito de acusación, el hombre habría mantenido relaciones simultáneas con mujeres a las que conocía en Londres o España, y a las que trasladaba a Marbella con su consentimiento. Una vez allí, supuestamente ejercía sobre ellas un control absoluto, imponiéndoles restricciones económicas, prácticas sexuales forzadas y normas de comportamiento extremo como no hablar ni mostrar emociones