El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, ha destacado la «apuesta importante por una mejor calidad del servicio» que supone que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Marbella (Málaga) asuma los asuntos nuevos en esta materia de Estepona.
Del Río se ha reunido este viernes con la presidenta de la Audiencia de Málaga, Lourdes García; la fiscal delegada de Andalucía de Violencia sobre la Mujer, Flor Torres; los decanos de Marbella y Estepona; los titulares y los letrados de la Administración de Justicia de los juzgados en esta materia de ambas localidades para abordar la puesta en marcha de esta medida a partir del 1 de abril para los nuevos casos que entren.
Según ha recordado el presidente del TSJA, es una medida «que ya lleva varios años en estudio» y ha apuntado que con esta reunión se pretende abordar la coordinación y dificultades que puedan surgir en para la puesta en marcha y «podamos atender mejor a las víctimas y en definitiva a todos los ciudadanos».
«Se trata de optimizar recursos, creo que esa es una medida importante, y al mismo tiempo, la especialización en una materia que exige una respuesta mucho mejor para la víctima, más ágil, más cercana, más especializada», ha señalado, al tiempo que ha apuntado que hasta ahora estos asuntos en Estepona lo lleva un juzgado mixto «con muchísimas dificultades».
Ha incidido en que se persigue, teniendo en cuenta «unas distancias prudenciales para que no haya efectos negativos», dar «una mejor prestación del servicio tanto para las víctimas en esta materia como también para los ciudadanos en general» en lo que se refiere a los juzgados mixtos.
Al respecto, ha apuntado que se había detectado «que hay ciertas poblaciones de juzgados mixtos, como es Estepona o Torremolinos y otros, donde había muchos problemas en esos jugados que compatibilizaban todas las materias civil, penal, violencia, etcétera, lo que daba lugar a mucha espera o bien de las víctimas o bien de los ciudadanos en general».
Del Río ha recordado que esta medida ya empezó en Andalucía con el Campo de Gibraltar y ahora mismo está en varios territorios a nivel nacional; mientras que este año se va a empezar en la comunidad andaluza en Jaén, Granada, Málaga y también en Cádiz, «que se va a hacer con Puerto Real y San Fernando».
En el caso de Málaga, está previsto que los juzgados de la capital asuman los asuntos de Violencia sobre la Mujer de Torremolinos. Al respecto, ha explicado que está pendientes de una obra de adaptación, «porque se crea un juzgado nuevo; es decir, la capital pasa de tres a cuatro juzgados de Violencia», estimando que «de aquí al verano será ese el siguiente» cambio en ponerse en marcha.
Del Río ha dicho que comprende «que esto al principio va a plantear una serie de reajustes necesarios de guardias, de detenidos, de víctimas, de traslados, de recursos personales, telemáticos»; pero ha reiterado que «es una apuesta importante por una mejor calidad del servicio».
Según ha señalado, el juzgado especializado en esta materia de Marbella «tiene una carga importante de trabajo, pero que hemos pensado que puede asumir algo más de competencias para seguir en esa única, exclusiva y excluyente competencia; sin perjuicio de que si vemos con el tiempo que necesita algunos refuerzos puntuales sea de personal o sea de algún juez complementario, se buscaría».
Ha apuntado que normalmente en Violencia sobre la Mujer «se trabaja con 1.600 asuntos más o menos que puede ser una carga de entrada razonable», apuntando que el de Marbella «está sobre 1.200 o 1.400 asuntos y Estepona puede estar en torno a 400 asuntos».
«Habrá que estar muy encima por si hay que reforzarlo, porque lo que nos interesa es no estropear lo bien que funciona el juzgado de Marbella, asegurarnos que los asuntos de Violencia de Estepona los pueda llevar también y los refuerzos que sean necesarios», ha incidido el presidente del TSJA.
Cuestionado por los problemas que puedan tener las víctimas para trasladarse desde sus localidades a Marbella, Del Río ha admitido que «es verdad que eso está ahí», pero ha abogado por no centrarse solo en ese aspecto; «habrá que ayudar en la medida de lo posible. Los abogados tienen ese mismo problema en todo tipo de juicios y en las víctimas aquellas que tengan problemas, para eso están ayudas sociales, si es necesario, para que se les pueda ayudar en el traslado, como ocurre en todo tipo de delitos».
